Y ahí estaban. - B26

Bueno... otro coso yaoi~~ Por supuesto, de Bel y Fran asdaklñsf <3333.

No sé, me dio o3o. 

Ehm... no hay mucho, últimamente siempre pongo los títulos con la primera frase del coso raro, por vagancia, quizás. Quien sabe... Nah, sí, es vagancia xD. 

Bueno... eso. 

Autora: Hann/Hann Pazguata [Blogger-Facebook]/ TheUnicornGay [DevianART-Fanfiction.net] 

Anime: KHR! 

Pareja: B26 [BelxFran]

Y ahí estaban.

Y es que eran raras las mañanas en las que Fran se despertara en su cama. Siempre, siempre estaba en la del príncipe. ¿Por qué? Pues porque, como estamos en horario infantil, eran más cómodas.

Aunque no era que cada noche Bel se lo follara, más bien, Fran iba a esa habitación por costumbre, porque el príncipe le arrastraba o porque quería estar con alguien, ¿Quién más qué con Bel?

Se despertó. Pasó su mano por su cabello y, mirando a Bel, ni si quiera se preguntó qué hacía ahí, como lo haría cualquier persona encontrándose en una cama que no era la suya, más tratándose de un hombre con otro hombre. Eso le parecía estúpido. ¿Por qué se lo preguntaban? Si lo hecho, hecho está. Sabiendo la respuesta no harás nada, es mejor dejarlo pasar. Y, además, era mucho más estúpido que Fran se lo preguntase a si mismo, porque ya estaba acostumbrado.

- Bel-sempaai~~ Se le ven los ojos~~ - Sonrió al ver como Bel se despertaba de golpe, se incorporaba en la cama más rápido que cualquiera y se tocaba el flequillo. – Era broma, estúpido sempai. Tan inocente~ -

Bel bufó.

- ¿Siempre te despiertas así de irritable, rana? –

- No. – Negó con la cabeza, encogiéndose de hombros mientras se sentaba al lado del príncipe. – Sólo cuando despierto antes de usted… –

- Eso es siempre, idiota. –

- No es mi culpa que se motive por las noches y después duerma hasta las 11 de la mañana, sempai inútil. –

El príncipe se quedó en silencio unos segundos, aguantando las ganas de tirarle esos tres cuchillo que tenía en la mano a la rana y… a la mierda, se los tiró.

- Seeempai~~ Me hace daño~ -

- Shishishi~~ ¿No te hacía más daño por la noche? Al menos gritabas. –

- ¡Es un sádico, sempai! – Hizo un pequeño mohín. – Si es así conmigo no quiero ni pensar como será si despierta al lado de… - Torció los labios, en una sonrisa extraña - … su hermano. –

Había dicho "su hermano". Que venía a ser lo mismo que decir Rasiel, que decir "Sempai, máteme" o "Quiero unos cuantos cuchillos más en mi estúpido gorro de rana, gran príncipe" en el vocabulario de Belphegor, el que mató a su familia, el que se vuelve loco cuando la sangre —SU sangre— es derramada, el único hombre que se folla a la rana tantas veces quiera, el único e inigualable príncipe que se convertirá en rey.

- Nunca me despertaría al lado de mi hermano. – Dijo, medio temblando, tras unos segundos pensando una respuesta que no afectara la vida de la rana.

- También dijo que estaría una semana sin violarme y mire. –

- Es diferente. –

- El príncipe es un mentiroso~~ ¿Qué hará su hermano cuando se entere de eso? Seguro que no le gusta nada que su fallido hermano sea un embustero… -

- Me importa madres lo que piense Rasiel. Es un idiota. Como tú. –

- Oh, ¿Me está comparando con la persona qué más odia? Me duele, sempai. –

- … Mira, Fran. Verás… No te estoy comparando con él… lo que estoy diciendo es… es… -

Bel no sabía que decir.

Fran había ganado. Fran sonrió, le dio un beso y, dejando al príncipe en un estado de confusión mental analizando una posible respuesta, se fue a desayunar.

- ¡LUSS-SAAAAAAAAAAAAAAAAAAAN~~! ¿Y el desayuno? -